El amor es la fuerza que mueve el universo entero, mueve una hoja, mueve los mares, y mueve las grandes ideas y sueños a hacerse realidad.
Esta es la historia de cómo el amor de una familia, le está dando la vuelta al mundo.
Luego de 1945 una familia de inmigrantes italianos viajaron a Venezuela escapando de la crisis post guerra que había azotado toda Europa y como muchos migrantes de aquel entonces Venezuela se convirtió en su casa.
El nono, como le decíamos al abuelo, (quien hizo parte en el comando de paracaidistas de guerra de esa época), Con su gran espíritu emprendedor y sus múltiples emprendimientos de aquel momento, decidió que quería iniciar un negocio que conectara con los gustos gastronómicos de la gente local, así que decidió abrir un puesto de comida rápida.
Siempre con un chiste a flor de piel y una sonrisa para regalar, salía a servir a la gente con su característico carisma, sentido del humor y gran corazón generoso, logrando que aquel pequeño puesto de comida, lograra agolpar largas filas solo para disfrutar de un momento diferente.
Con ese pequeño negocio, mi abuelo logró que mi papá lograra hacer su carrera universitaria y años después esos conocimientos impulsaron a mi papá a industrializar ideas que habían comenzado siendo pequeñas, pero, nada que se hace con amor, es pequeño.
Mi padre comenzó a darle vida y forma industrial a una compañía que comenzó a crecer rápidamente.
Años después de alcanzar una gran expansión, tuvimos que enfrentar en el país situaciones que pusieron en riesgo la operatividad de la empresa.
Mi abuela una vez me dijo algo que nunca olvidaré, “tu eres la espalda de tu padre y él es tu espalda”, juntos podíamos defender el legado del abuelo, fue allí cuando decidí entrar a la compañía y por primera vez estaba iniciando un proyecto motivado por el amor y no por el dinero.
La situación económica de aquel entonces suponía implementar ideas creativas, y es allí donde comenzaron a surgir proyectos de innovación que hasta hoy son una bandera para nuestra compañía.
La famosa salsa de maíz Fritz, que hasta entonces no existía un producto similar, la salsa cheddar, las papas YILL, y muchos de los desarrollos que permitieron el posicionamiento de FRITZ.
Hoy Fritz es una de las compañías del rubro de alimentación más importantes del país, con un gran crecimiento en el segmento foods services, ya iniciamos operaciones de comercialización y experiencias de servicio en muchos países de América y Europa.
Y estamos felices de no haber renunciado, de representar en el mundo el sabor venezolano, el sabor del amor, el sabor de la alegría.
Por eso, cada vez que una salsa nuestra se sirve en alguna mesa en la que se comparten sonrisas, seguimos sintiendo que el nono sonríe, que su carisma sigue recorriendo las ideas que materializamos, aunque ya no está con nosotros, que su legado sigue siendo el amor y el servicio con el que hacemos las cosas.
Es por ello que Fritz, más allá de ser una empresa fabricante de salsas industriales para acompañar los platos más deliciosos del mundo, es y será un legado familiar, que acompaña momentos de compartir felicidad, alegría y un gran sabor.
1 comentario
Leo
historia de superación! Felicidades